En 2017 se han abierto en el Mundo, según la web “h2stations.org”, 64 nuevas hidrogeneras, o lo que es lo mismo, estaciones de recarga de hidrógeno para vehículos propulsados mediante pila de combustible. Esto supone un frenazo en la apertura de nuevas hidrogeneras respecto al año 2016, cuando se abrieron 92. En el año 2016 Japón construyó aproximadamente la mitad de las estaciones de recarga (45) mientras que en el año 2017 tan solo abrió 11. Por tanto, si no se tiene en cuenta al país nipón, el ritmo de apertura de estaciones de recarga de hidrógeno en el resto del mundo es aproximadamente el mismo, 58 en 2016 y 53 en 2017. A principios de 2018, el número de estaciones de recarga de hidrógeno operativas en el mundo ascendía a 328. Sin embargo, la distribución de las hidrogeneras no se encuentra homogéneamente repartida a lo largo del globo.
Las 328 hidrogeneras operativas en el mundo a principios de 2018 se encuentran repartidas como sigue (nota: la suma del número de estaciones por continentes da como resultado 327, no 328. Sin embargo, estos son los datos recogidos en la web h2stations.org):
- 139 en Europa, de las cuales 56 en Alemania
- 118 en Asia, de las cuales 96 en Japón
- 68 en América del Norte, de las cuales 65 en EE.UU
- 1 en América del Sur
- 1 en Oceanía (Australia)
De estas 328 estaciones de servicio de hidrógeno, 227 son públicas y a otras 24 se puede acceder solicitando cita previa. Las restantes se emplean para abastecer autobuses o flotas cautivas. Así pues, el porcentaje de hidrogeneras públicas ha pasado del 68.5% a principios de 2017 (188 públicas de las 274 estaciones de servicio totales) a un 76.5 % a principios de 2018. Un gran incremento que incentiva el uso de los vehículos particulares propulsados por hidrógeno.
En Alemania durante 2017 han entrado en servicio 24 hidrogeneras públicas. Esto ha permitido duplicar el número de estaciones públicas germana. Así, de las 56 estaciones que componen la red de estaciones de reabastecimiento de hidrógeno del país, 45 son públicas. Esto sitúa a Alemania como el segundo país del mundo con la mayor red pública de hidrogeneras, sólo superado por Japón. Además, el país germano ya tiene planificada la construcción de 31 nuevas hidrogeneras a fin de cumplir su objetivo de contar con 100 estaciones de recarga de hidrógeno en 2019.
Aunque durante el año 2017 sólo se hayan construido 11 hidrogeneras en Japón, el país asiático sigue contando con la mayor red pública de hidrogeneras (91) fruto de la gran inversión que realizó en los años 2015 y 2016 para ampliar su red de estaciones de servicio. En diciembre se conoció la noticia de que 11 compañías iban a unir fuerzas a fin de aumentar el número de estaciones de recarga de hidrógeno en el país. Las primeras cifras puestas sobre la mesa por el consorcio plantean la construcción de 80 nuevas hidrogeneras en los siguientes cuatro años. Esta acción está alineada con la intención del Gobierno japones de desarrollar una sociedad del hidrógeno y que los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 sirvan como escaparate ante el mundo de las bondades de las tecnologías del hidrógeno. Empresas japonesas como Toyota, Panasonic o Toshiba están situándose a la vanguardia de esta nueva tecnología desarrollando equipos, componentes, prototipos y productos comerciales. De esta forma, llegado el momento podrán vender esta tecnología fuera de sus fronteras, lo que les proporcionara pingües beneficios.
El tercer país con una mayor red pública de estaciones de servicio es Estados Unidos que cuenta con 40 hidrogeneras públicas. En EE.UU tan sólo el estado de California está invirtiendo de forma clara en hidrógeno y pilas de combustible. De hecho, en 2017 en los Estados Unidos únicamente se han abierto 5 nuevas estaciones de recarga de hidrógeno, y todas ellas en ese Estado. En California el hidrógeno está englobado dentro de un proyecto de gran envergadura que pretende reducir las emisiones de gases de efecto invernadero del Estado. Para ello, se están promoviendo las energías renovables, así como el uso de coches eléctricos, híbridos y de pila de combustible entre otras medidas.
En Europa las estaciones de recarga de hidrógeno y los vehículos propulsados por pila de combustible no son solo cosa de Alemania, otros países también cuentan con planes y proyectos para desarrollar la movilidad mediante pilas de combustible en sus territorios. Por ejemplo, Reino Unido, los países escandinavos, Francia, Bélgica o Italia. De hecho, Dinamarca es el país con la mayor densidad de hidrogeneras por habitante (11 hidrogeneras y 5,73 millones de habitantes) y fue el primero en ofrecer una cobertura completa para la recarga de hidrógeno en su territorio. Aunque es un país pequeño en el cual no es complicado desplegar una red de cobertura nacional, ello requiere un cierto compromiso y esfuerzo que los daneses han llevado a cabo, y mantienen. Noruega (9 hidrogeneras y 5,23 millones de habitantes) se sitúa en segunda posición en cuanto a densidad de hidrogeneras por habitante. En tercer lugar, se encuentra Japón (96 hidrogeneras y 126,7 millones de habitantes) seguido de Austria (6 hidrogeneras y 8,75 millones de habitantes) y Alemania (56 hidrogeneras y 82,67 millones de habitantes).
La situación estratégica de Alemania en el centro de Europa hace que el desarrollo de su red de hidrogeneras favorezca las conexiones del norte del continente con el sur, así como del este con el oeste. A finales de 2016 ya existía una autopista de hidrógeno Norte-Sur en Europa que permitía viajar con un coche propulsado por pila de combustible de hidrógeno desde Noruega hasta el norte de Italia. Igualmente, existía un corredor Este-Oeste que permitía ir desde el este de Francia hasta Viena. Estas dos arterias europeas del hidrógeno se han mejorado notablemente a lo largo de 2017 con la apertura de 36 nuevas estaciones de recarga de hidrógeno. En Noruega, Gran Bretaña y Francia se han abierto tres hidrogeneras públicas, mientras que en Austria se han abierto dos.
A pesar del mayor número de hidrogeneras existente en Japón, los dos únicos países del mundo que presentan una red de recarga de hidrógeno con cobertura nacional son Dinamarca y Alemania. Ello es debido a su enfoque de cobertura integral. Otros países y regiones como California, Noruega, Reino Unido o Japón siguen una estrategia diferente, construyendo las hidrogeneras en núcleos densamente poblados. Esta estrategia provoca el aislamiento de los núcleos y la dificultad para desplazarse de unos a otros.
Aunque en 2017 haya disminuido el número de hidrogeneras que han entrado en servicio respecto a 2016, el número total de estaciones de servicio, así como el de hidrogeneras públicas han seguido creciendo. Además, dos de los países que más apuestan por el hidrógeno, Alemania y Japón, tienen previsión de seguir construyendo estaciones de recarga de hidrógeno a buen ritmo durante los próximos años.